Sin título

Me enamoré de esos hermosos ojos,
sin imaginar que abajo de ellos encontraría esos lindos labios,
que al sonreír me hicieron enamorarme aún más.
Me enamoré en la forma que me miras,
me enamoré de tus besos, de tus abrazos y de tus “te extraño”,
y como al pasar el tiempo un “te quiero”
se convirtió en un anhelado “te amo”.
Cada día me enamoro más de la misma persona
y eso es lo mejor, porque eres mi persona favorita
con la que disfrutaría pasar el resto de mis días.