Geografía de su cuerpo

He visto cosas bellas, un atardecer de tonos naranja y amarillo, un bosque verde y frondoso, un padre abrazar a sus hijos, un cielo nublado con gotas de lluvia cayendo sobre la tierra y un suelo tan blanco como la leche después de una intensa nevada...

Pero jamás algo como esto, nunca algo tan grande y bello como esto, de su piel morena nace todo un camino que recorrer, desde un bosque denso y oscuro que de forma salvaje cae sobre sus hombros, hasta la cueva que se encuentra entre sus piernas. Sus ojos son luceros que alumbran en cielo y su boca es una cuenca de dónde nace vida cada que sonríe, sus pechos son montañas firmes y erguidas donde si te descuidas puedes morir de deseo, sus caderas son tan peligrosas por sus curvas, que cualquier aventurero experto puede morir, sus muslos poderosos protegen la entrada al paraíso, donde la vida y la muerte yacen juntas en un delicado vals que desemboca en un mar de deseo y pasión.

Pero la parte más importante de su geografía no está a la vista, ni siquiera se puede llegar de forma convencional, si, corazón, ese lugar en donde solo los afortunados llegan con suerte, es el lugar más especial que puede existir en ella, es cálido, amable y bombea lo litros de ternura a cada rincón de su cuerpo , Dios, permite que lo encuentre, permíteme habitar ahí, permíteme amarla.